A veces, como esta mañana, lo quieres matar porque pasa de todo y en lugar de pegar el salto de la cama se queda retozando hasta el límite de mi paciencia , y de la de su hermano, que ve cómo pasa el tiempo y él, !ni se inmuta!!!!
Otras en cambio es adorable, tal vez a esta edad, el que más.
Y siempre es sorprendente.
El lo tiene claro. Quiere un móvil y quiere permisos para todo. Porque quiere ser youtuber!!!!
Yo me parto, porque realmente ese es su sueño. Yo le digo que ser Youtuber es muy duro porque hay mucha presión, porque cada día la exigencia es mayor. Pero él no lo entiende, y encuentra realmente divertido hacer cada día cinco o diez o treinta vídeos jugando y batallando con la PS4 o haciendo el mongolo con música.
Estos días que estamos de vacaciones y que hace muy buen tiempo, porque las temperaturas están suaves y no ha llovido desde hace tres semanas, que cayeron tres gotas, el pequeño de mis tres ejerce mucho de hijo único. Sus hermanos casi no paran en casa entre cumpleaños, entrenamientos y fiestas de pijamas.
Él , lejos de sentir envidia, aprovecha la ocasión para ser aún más cariñoso y contar con el favor de sus padres, o sea, un cara, su afán es conseguir que le dejemos jugar a sus juegos favoritos. Está encantado ejerciendo de hijo único y yo viéndole disfrutar.
No es que no le pongamos límites en el juego, claro que los tiene. Su emoción viene de poder jugar un rato a juegos donde de modo online sabe que se va a encontrar con su hermano y los amigos de éste. Y así, aunque cada uno esté en otro lado, siguen estando en contacto. El trato es, al primer insulto, palabra malsonante, grito o fuera de tono... se apaga la maquinita y ya se verá cuando se vuelve a encender.
Lo tiene claro. Sabe comportarse y disfruta haciéndonoslo ver.
Y yo estoy que me lo como.
