12 sept 2017

Seis añitos

Os escribo escondida, como una adolescente, en un rincón de mi dormitorio. Sentada en el suelo, pegada al cable que carga mi teléfono, la cabeza apoyada sobre la cama. Me duele el cuerpo y tengo los ojos secos. Todo es por culpa de este aparatito del infierno. Gracias a él escribo, me mantengo al día de la actualidad de España, de las cosas de mi familia, de las vidas de mis amigos- los que están a un lado y a otro del Atlántico-, me comunico con los de aquí, allá y acuyá.
Pero a la vez, me engancho, me engancho y no hago nada más. Ahora me ha dado por las casas- sigo buscando- y no hay dia que no me meta cinco veces a revisar las novedades inmobiliarias de mi pueblo, del de al lado, del de más allá... Y nada. 
Todos nos dicen que tengamos paciencia, que sigamos mirando por si aparece la esperada casa. Pero no aparece, ni de cerca, y si en algún momento hemos tenido ilusión por alguna... Zas! Se ha esfumado de un plumazo. 
No perdemos la esperanza de encontrarla, ni se nos acaban los sueños al pensar en ella. Ayer, mientras paseabamos a Caster por nuestro bosque, me entró un ataque de risa, de los mas absurdo:
Alvaro:" Cuando compremos la casa  vamos a comprar un sillón como el que vimos el sábado...
El pobre no pudo terminar la frase, enseguida me asaltó la risa , esa que te hace dolor de tripa, de cara, de todo y que no te deja hasta que un pensamiento frio y realista se cruza en medio. 
El sabado fuimos a una exposicion de cosas bonitas, no sabria como llamarlo. En un castillo, stands de cosas bonitas como gafas de madera o piedra a 600€ el par, camisas de batista para niños a 100€ , sofás de piel envejecida a 7000€ , si 7 mil euros. Por eso me entró la risa. 
Yo, que tengo muebles repartidos por Europa y hasta traidos de latinoamerica, y que me gusta mas Ikea que a un tonto un lápiz, jamás me compraria un sofá de 7000€ por muy bonito que fuera( ademas no me gustaba mucho) en cambio si me gustaron las alfombras y las mesas de tronco de árbol y pie de acero con cristal, en una mesa de esas sí invertiría encantada. 
El caso es que no se nos acaban los sueños, y seguimos riendo como nunca. Gozamos de salud de alma, que no es poco! 
Y aqui el motivo del título del post, llevo 6 años escribiendo este Blog. Sé que no soy constante, pero no está mal, no?